Que difícil es describir a una persona. A lo largo de mi corta vida siempre he tenido la sensacion de que nunca llegaría a conocer a una por completo, hoy, lo afirmo; y es más, ni siquiera seré capaz de conocerme a mi mismo. ¿Que por qué? Tal vez sea un misterio de la propia vida, de nuestra propia existencia, sin embargo, no por ello me voy a rendir.
A partir de una verdad clara, mi curiosidad aumenta, y al hacerlo siento la necesidad de convertir un enigma en una solución. Bien, ¿que se puede decir de las personas? Muchas cosas, es cierto, pero... ¿y si todas las cosas que se podrían decir de una persona tuvieran su origen en un patrón común?
Voy a ser claro, he llegado a la conclusión de que hay dos tipos de personas, y por ende, dos tipos de corazones: las caritativas y las solidarias, ¿que en qué se diferencian? Las caritativas son aquellas personas que reparten aquello que tienen una vez han consumido su parte. En cambio, las solidarias son aquellas que dan atodo lo que tienen sin importarlas lo que dejan para sí mismas. aun con la consecuencia de quedarse sin nada.
PD: Y tú, ¿qué quieres? Sin duda, yo lo tengo claro.
Buena reflexión. Aunque suene mal, yo soy sincera... y no sé qué clase de persona soy.
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